10346 Views

3 actividades sensoriales de Halloween para niños

Como seguro que sabes… ¡nos encanta Halloween! Se trata de una de las tradiciones con más arraigo en los países anglosajones, que con el tiempo se ha acabado convirtiendo en una fiesta súper divertida para los niños. Este año queremos proponerte que lo celebres haciendo actividades sensoriales, que sirvan tanto para practicar inglés como para trabajar la psicomotricidad fina de tus hijos… ¡aunque eso suponga ensuciarse un poquito las manos!

Sensory Bin

La primera actividad que te proponemos consiste en hacer una sensory bin, es decir, una caja con objetos sensoriales. Puedes usar judías negras como base (o algún otro material similar), añadiendo todo tipo de objetos monstruosos: ojos de monstruos, gusanos de juguete, esqueletos, animales, calabazas… así como cualquier otra cosa terrorífica que tengas en casa.

Una vez hecha, puedes usar la sensory bin de muchas formas. La forma más fácil podría ser intentar adivinar cada objeto, tocándolo con las manos y con los ojos tapados. También puedes dibujar cartas con tus hijos que hagan referencia a los objetos que hay en la caja, y de nuevo con los ojos cerrados intentar sacar el objeto en cuestión. O puedes trabajar la psicomotricidad fina de los más pequeños usando una cuchara o unas pinzas para sacar los objetos.

En cualquier caso, esta actividad sensorial es una oportunidad para practicar el vocabulario en inglés de esta fiesta terrorífica y divertida.

Sensory Bin de Halloween
Sensory Bin de Halloween

Fuente: firefliesandmudpies.com

Espaguetis sensoriales

Estos espaguetis sensoriales son, en realidad, una evolución de la actividad sensorial anterior. Se trata de hacer algo muy parecido, pero usando espaguetis de colores en vez de judías negras, de forma que palpar los objetos con las manos o sacarlos con la cuchara o las pinzas sea un poquito más complicado… ¡y pringoso!

Además, añade la diversión de tener que teñir los espaguetis, hirviéndolos primero y usando diversas combinaciones de colorante alimenticio para conseguir colores distintos.

Fuente: pre-kpages.com

Jack’o’lantern

Las famosas linternas de calabaza típicas de Halloween pueden ser un poco complicadas de hacer para los niños, especialmente para los más pequeños, por lo que aquí tienes una actividad sensorial con la que, además conseguirás tener en casa estas divertidas lámparas con caras monstruosas de una forma más fácil. La idea es usar contenedores transparentes, de plástico o de vidrio, pintados como si fueran caras monstruosas.

Lo primero que hay que conseguir son esos granos de arroz teñidos de color naranja. Para ello debes usar colorante alimenticio de este color, disolverlo en vinagre blanco y mezclarlo bien con el arroz (crudo, sin cocer) en una bolsa hermética. Una vez hecho esto, debes dejarlo secar toda la noche sobre un papel de cocina.

Al día siguiente tus hijos pueden rellenar los contenedores de ese material naranja, usando cucharas o cucharones. De esta forma, practicarán la psicomotricidad fina, ayudándoles en el aprendizaje de estos utensilios.

Por supuesto, esta actividad ofrece muchas posibilidades para practicar inglés, ya que puedes hablar de las partes de la cara de las linterna, así como de las formas (triángulo, cuadrado, círculo…) que has usado para dibujarlas.

Jack'o'lantern con arroz naranja
Jack’o’lantern con arroz naranja

Fuente: happytoddlerplaytime.com

 

10347 Views

3 actividades sensoriales de Halloween para niños

Como seguro que sabes… ¡nos encanta Halloween! Se trata de una de las tradiciones con más arraigo en los países anglosajones, que con el tiempo se ha acabado convirtiendo en una fiesta súper divertida para los niños. Este año queremos proponerte que lo celebres haciendo actividades sensoriales, que sirvan tanto para practicar inglés como para trabajar la psicomotricidad fina de tus hijos… ¡aunque eso suponga ensuciarse un poquito las manos!

Sensory Bin

La primera actividad que te proponemos consiste en hacer una sensory bin, es decir, una caja con objetos sensoriales. Puedes usar judías negras como base (o algún otro material similar), añadiendo todo tipo de objetos monstruosos: ojos de monstruos, gusanos de juguete, esqueletos, animales, calabazas… así como cualquier otra cosa terrorífica que tengas en casa.

Una vez hecha, puedes usar la sensory bin de muchas formas. La forma más fácil podría ser intentar adivinar cada objeto, tocándolo con las manos y con los ojos tapados. También puedes dibujar cartas con tus hijos que hagan referencia a los objetos que hay en la caja, y de nuevo con los ojos cerrados intentar sacar el objeto en cuestión. O puedes trabajar la psicomotricidad fina de los más pequeños usando una cuchara o unas pinzas para sacar los objetos.

En cualquier caso, esta actividad sensorial es una oportunidad para practicar el vocabulario en inglés de esta fiesta terrorífica y divertida.

Sensory Bin de Halloween
Sensory Bin de Halloween

Fuente: firefliesandmudpies.com

Espaguetis sensoriales

Estos espaguetis sensoriales son, en realidad, una evolución de la actividad sensorial anterior. Se trata de hacer algo muy parecido, pero usando espaguetis de colores en vez de judías negras, de forma que palpar los objetos con las manos o sacarlos con la cuchara o las pinzas sea un poquito más complicado… ¡y pringoso!

Además, añade la diversión de tener que teñir los espaguetis, hirviéndolos primero y usando diversas combinaciones de colorante alimenticio para conseguir colores distintos.

Fuente: pre-kpages.com

Jack’o’lantern

Las famosas linternas de calabaza típicas de Halloween pueden ser un poco complicadas de hacer para los niños, especialmente para los más pequeños, por lo que aquí tienes una actividad sensorial con la que, además conseguirás tener en casa estas divertidas lámparas con caras monstruosas de una forma más fácil. La idea es usar contenedores transparentes, de plástico o de vidrio, pintados como si fueran caras monstruosas.

Lo primero que hay que conseguir son esos granos de arroz teñidos de color naranja. Para ello debes usar colorante alimenticio de este color, disolverlo en vinagre blanco y mezclarlo bien con el arroz (crudo, sin cocer) en una bolsa hermética. Una vez hecho esto, debes dejarlo secar toda la noche sobre un papel de cocina.

Al día siguiente tus hijos pueden rellenar los contenedores de ese material naranja, usando cucharas o cucharones. De esta forma, practicarán la psicomotricidad fina, ayudándoles en el aprendizaje de estos utensilios.

Por supuesto, esta actividad ofrece muchas posibilidades para practicar inglés, ya que puedes hablar de las partes de la cara de las linterna, así como de las formas (triángulo, cuadrado, círculo…) que has usado para dibujarlas.

Jack'o'lantern con arroz naranja
Jack’o’lantern con arroz naranja

Fuente: happytoddlerplaytime.com