¿Cómo fue vuestro primer contacto con Helen Doron English?

 Nuestro primer contacto con Helen Doron English fue a través de una búsqueda en internet. Queríamos encontrar una metodología innovadora para la enseñanza del inglés y descubrimos la franquicia Helen Doron. Nos pusimos en contacto con la oficina principal en Barcelona, donde nos recibieron y nos explicaron en detalle el método. Desde el primer momento nos pareció fascinante: la combinación de música, juego y refuerzo positivo hacía que los niños aprendieran de manera natural, como si fuera su lengua materna.

¿Cómo surgió la oportunidad de tener vuestro propio centro?

 Somos un grupo de cinco profesores con una gran pasión por la enseñanza del inglés y siempre habíamos soñado con abrir nuestra propia academia. Cuando conocimos el método Helen Doron, sentimos que habíamos encontrado exactamente lo que queríamos ofrecer. Después de la reunión en Barcelona, decidimos apostar por la franquicia y abrir nuestro propio centro en Vilafranca del Penedès. Comenzamos con mucha ilusión y, aunque al principio fue un reto, la respuesta de las familias fue muy positiva.

¿Cuál ha sido vuestra evolución en estos 10 años?

Ha sido una evolución increíble. Empezamos con 40 alumnos y ahora tenemos alrededor de 400. Hace tres años, tuvimos la oportunidad de trasladarnos a un local más grande y moderno, lo que nos ha permitido ofrecer un espacio más cómodo y adaptado a nuestras necesidades. También hemos ampliado nuestro equipo de profesores y seguimos formándonos continuamente para mejorar nuestra enseñanza.

¿Seguís teniendo alumnos que empezaron con vosotros hace 10 años? 

 Sí, y es algo que nos hace muchísima ilusión. De aquellos primeros 40 alumnos, unos 23 siguen viniendo a la academia. Han crecido con nosotros y ver su evolución en el inglés es algo que nos llena de orgullo.

Y de los que ya se han ido, ¿tenéis contacto con ellos?

 Sí, especialmente con aquellos cuyos hermanos siguen asistiendo a la academia. Nos encanta saber de ellos, cómo les va en en la universidad. Algunos nos cuentan que gracias a lo aprendido aquí han logrado vivir experiencias en el extranjero con mucha seguridad en su inglés.

¿Qué es lo que más os gusta y os hace disfrutar en el día a día?

 Sin duda, ver cómo los niños y jóvenes disfrutan aprendiendo inglés. Nos encanta su energía, su entusiasmo y la manera natural en que adquieren el idioma con nuestra metodología. También es muy gratificante ver la confianza que ganan en sí mismos cuando se comunican en inglés.

Para terminar, ¿podrías contarnos alguna anécdota especial de todos estos años?

 Hay muchas, pero una que nos emociona especialmente es la historia de uno de nuestros alumnos, que tiene Asperger. Desde el primer día, mostró un gran interés por el inglés y se sintió muy cómodo con nuestra metodología. A lo largo de estos 10 años, ha sido increíble ver su progreso y cómo ha ganado confianza en sí mismo. Su constancia y entusiasmo lo han llevado a conseguir el certificado oficial de B2, algo que nos llena de orgullo. Esta historia es un claro ejemplo de cómo un método adecuado y un entorno de apoyo pueden marcar la diferencia en el aprendizaje de cualquier niño.